SED IMITADORES DE CRISTO

Jun 7, 2024

SALMOS 69:22-28

22 Que la abundante mesa servida ante ellos se convierta en una trampa,
    y que su prosperidad se vuelva un engaño.[b]
23 Que sus ojos queden ciegos para que no puedan ver,
    y haz que sus cuerpos tiemblen continuamente.[c]
24 Derrama tu furia sobre ellos;
    consúmelos en el ardor de tu enojo.
25 Que sus casas queden desoladas
    y sus carpas, desiertas.
26 A quien tú has castigado, agregan insultos;
    añaden dolor a quienes tú has herido.
27 Amontona sus pecados en una enorme pila,
    y no los dejes en libertad.
28 Borra sus nombres del libro de la vida;
    no dejes que sean incluidos entre los justos.

Estimado lector, 

Este salmo permite comprender el estado de angustia y ansiedad en que estaba sumido David, y hace referencia, metafóricamente, a la condición del Mesías. 

Este pasaje introduce a conocer más sobre cómo fue perseguido Jesús por los religiosos y políticos de su época. A diferencia de David, Jesús pidió al Padre celestial que perdonara a todos los que lo habían maltratado y ofendido. 

Estas citas reflejan la intensa angustia que vivió David por ser perseguido y cómo reaccionó, pidiendo lo peor para sus enemigos, a diferencia de Jesús, que pidió perdón para ellos.

Hay momentos en la vida del creyente en que se presenta el temor, la angustia y las ganas de llorar. En esos momentos, se debe recordar al alma que Dios no ha abandonado. En 1 Corintios 11:1, el apóstol Pablo dice a los corintios que sean imitadores de él, como él lo es de Cristo. Este es el mejor ejemplo y es lo que se debe pedir todos los días al Padre, ser imitadores de Nuestro Señor Jesucristo.