SALMOS 86:8-15
Ningún dios pagano es como tú, oh Señor;
¡nadie puede hacer lo que tú haces!
9 Todas las naciones que hiciste
vendrán y se inclinarán ante ti, Señor;
alabarán tu santo nombre.
10 Pues tú eres grande y haces obras maravillosas;
solo tú eres Dios.
11 Enséñame tus caminos, oh Señor,
para que viva de acuerdo con tu verdad.
Concédeme pureza de corazón,
para que te honre.
12 Con todo el corazón te alabaré, oh Señor mi Dios.
Daré gloria a tu nombre para siempre,
13 porque muy grande es tu amor por mí.
Me has rescatado de las profundidades de la muerte.[a]
14 Oh Dios, gente insolente se levanta en mi contra;
una pandilla violenta trata de matarme.
No significas nada para ellos.
15 Pero tú, oh Señor,
eres Dios de compasión y misericordia,
lento para enojarte
y lleno de amor inagotable y fidelidad.
CONTEMPLANDO SU GRANDEZA
Estimado Lector:
Este salmo está completamente enfocado en Dios y en la devoción de David hacia Él. Una de las características especiales de este salmo es que cada petición está acompañada de una razón por la cual la oración debe ser concedida, y su fuente está en las Escrituras. Existen frases que se encuentran en Éxodo 15:11 y Deuteronomio 3:24, así como en otros salmos.
En esta porción de la Biblia, el salmista, aunque se encontraba en una situación difícil (v.14), coloca toda su confianza en Dios, reconociendo Su misericordia, Su grandeza y Su fidelidad hacia aquellos a quienes ama.
De la misma manera, el Señor desea que cada creyente, como David, en medio de las debilidades y dificultades, lo reconozca como el único Dios que puede guiar, ayudar y sostener, no solo en tiempos de necesidad, sino todos los días de su vida, contemplando Su grandeza y considerando Sus caminos.