SALMOS 84:1-8

Aug 12, 2024

¡Qué bella es tu morada,
    oh Señor de los Ejércitos Celestiales!
Anhelo y hasta desfallezco de deseo
    por entrar en los atrios del Señor.
Con todo mi ser, mi cuerpo y mi alma,
    gritaré con alegría al Dios viviente.
Hasta el gorrión encuentra un hogar
    y la golondrina construye su nido y cría a sus polluelos
cerca de tu altar,
    ¡oh Señor de los Ejércitos Celestiales, mi Rey y mi Dios!
¡Qué alegría para los que pueden vivir en tu casa
    cantando siempre tus alabanzas! Interludio

¡Qué alegría para los que reciben su fuerza del Señor,
    los que se proponen caminar hasta Jerusalén!
Cuando anden por el Valle del Llanto,[b]
    se convertirá en un lugar de manantiales refrescantes;
    las lluvias de otoño lo cubrirán de bendiciones.
Ellos se harán cada vez más fuertes,
    y cada uno se presentará delante de Dios en Jerusalén.[c]

Oh Señor Dios de los Ejércitos Celestiales, oye mi oración;
    escucha, oh Dios de Jacob

LA MEJOR MORADA

Estimado lector:

Este Salmo, celebra el gozo de la adoración. Durante las festividades judías, peregrinos de todas partes llegaban a Jerusalén, un trayecto marcado por el júbilo y los cánticos. 

Este salmo refleja el anhelo de los adoradores por estar en el templo de Jerusalén, evidenciando el profundo amor del salmista hacia Dios y Su santuario.

Analógicamente, la reunión en la iglesia debería representar para el creyente, un espacio de regocijo al que ansíe acudir. El deseo ferviente de estar en comunión con Dios y adorarle, es un signo inequívoco de amor hacia Él. Esta conexión se fortalece, al tomar en serio Su palabra y depositar una mayor confianza en Él.

Una relación profunda con Dios se convierte en fuente inagotable de fortaleza para el peregrinaje espiritual, incluso en épocas de adversidad. Aunque el camino de Dios no está exento de dificultades, para quienes confían en Él, estos obstáculos se trans