¡Alabado sea el Señor!
¡Den gracias al Señor, porque él es bueno!
Su fiel amor perdura para siempre.
2 ¿Quién podrá enumerar los gloriosos milagros del Señor?
¿Quién podrá alabarlo lo suficiente?
3 Hay alegría para los que tratan con justicia a los demás
y siempre hacen lo que es correcto.
4 Acuérdate de mí, Señor, cuando le muestres favor a tu pueblo;
acércate y rescátame.
5 Déjame tener parte en la prosperidad de tus elegidos.
Permite que me alegre por el gozo de tu pueblo;
concédeme alabarte con los que son tu herencia.