¡ESPERANZA MÁS ALABANZA!

Jun 15, 2024

SALMOS 71:12-16

12 Oh Dios, no te quedes lejos;
    Dios mío, por favor, apresúrate a ayudarme.
13 Trae deshonra y destrucción a los que me acusan;
    humilla y avergüenza a los que quieren hacerme daño.
14 Seguiré con la esperanza de tu ayuda;
    te alabaré más y más.
15 A todos les hablaré de tu justicia;
    todo el día proclamaré tu poder salvador,
    aunque no tengo facilidad de palabras.[a]
16 Alabaré tus obras poderosas, oh Señor Soberano,
    y les contaré a todos que solo tú eres justo.

Estimado lector, 

El salmista tenía que lidiar con el hecho de que, a medida que avanzaban sus años, sus problemas no desaparecían. Los problemas permanecían. Esta es una prueba importante para algunos creyentes, pero el salmista la entendía como un impulso para su confianza constante y más personal en Dios. En una grave crisis, dependía de la ayuda divina. Sin embargo, en este salmo no se desespera ni parece perder el sentido del favor de Dios. El Salmo 71 es una combinación de problemas y alabanza.

Una esperanza agonizante produciría cantos decaídos; a medida que las expectativas se volvieran más tenues, la música se volvería más apagada. Pero una esperanza inmortal y eterna, que arde cada día con más intensidad, produce un cántico de alabanza que siempre cobra nueva fuerza.

El que va a la batalla contra sus enemigos espirituales debe ir confiando no en su propia fuerza, sino en la del Señor Dios; no en su propia justicia, sino en la de su Redentor.

El salmista solo estaba interesado en hablar de la justicia de Dios, no de la suya propia ni de la supuesta justicia de los dioses paganos. Debe pedirse al Espíritu Santo integridad y sabiduría para tener la paciencia suficiente para esperar en Dios, el único que defiende de quienes quieren hacer daño.