SALMOS 72:15-17
15 ¡Viva el rey!
Que se le entregue el oro de Saba.
Que la gente siempre ore por él
y lo bendiga todo el día.
16 Que haya grano en abundancia por toda la tierra;
que brote aun en la cima de las colinas.
Que los árboles frutales florezcan como los del Líbano
y los habitantes crezcan como la hierba en el campo.
17 Que el nombre del rey permanezca para siempre;
que se perpetúe mientras el sol brille.
Que todas las naciones sean bendecidas por medio de él,
y lo elogien.
Estimado lector,
Este pasaje de la Biblia enseña que el único rey que por siempre será Rey es Jesucristo de Nazaret y lo es por la eternidad. Permite también comprender la gracia de Dios hacia la humanidad mediante su hijo Jesucristo, manifestada en su poder y majestuosidad.
El Rey del universo y de la vida es Jesús, quien mostró su amor al ir a la cruz para redimir con su propia sangre y asegurar que la humanidad no sea esclava del pecado. Se debe confiar en que siempre tiene una buena razón para permitir todo lo que se vive. Se debe descansar en Él y saber que su bondad no tiene final.
Una vez que se entiende quiénes somos en Cristo, ¿Cómo no alabarlo, glorificarlo y vivir agradecidos con Él, procurando cada día más ser como Él?